Los líderes de Corea del Norte y Rusia, Kim Jong-un y Vladímir Putin, firmaron miércoles un “Acuerdo Integral de Asociación Estratégica” que incluye una cláusula de defensa mutua, según dijo el presidente ruso tras su cumbre con el líder norcoreano Kim Jong-un.
De acuerdo con información publicada por la agencia rusa Tass, el documento firmado entre ambos mandatarios contempla “la asistencia en caso de que uno de los dos países resulte agredido”, según Putin.
El presidente ruso también señaló que “los asuntos de seguridad y la agenda internacional” ocuparon una parte significativa de la agenda de las negociaciones con el mandatario norcoreano.
El jefe del Kremlin desveló parte del contenido de la nueva hoja de ruta que vertebrará las relaciones bilaterales entre ambos países, que se vienen reforzando a raíz de la «invasión» rusa de Ucrania y frente a la presión sobre Pionyang y Moscú por parte de Washington y sus aliados.
En este sentido, Putin afirmó que tanto Rusia como Corea del Norte “se oponen al uso con fines políticos de las sanciones, que solo sirven para socavar la situación internacional”.
“Nuestros países defienden consecuentemente el establecimiento de un orden mundial más justo, democrático y multipolar. Rusia y Corea del Norte desarrollan una política exterior autónoma e independiente y no aceptan el lenguaje del chantaje y el dictado”, destacó el presidente ruso.
“Pese a la presión externa, nuestros países se desarrollan exitosamente sobre una base soberana e independiente, se han prestado y se prestan apoyo mutuo como verdaderos amigos y buenos vecinos”, añadió.
El asesor de Putin en materia de política internacional, Yuri Ushakov, ya adelantó en la víspera que este nuevo tratado sustituirá a los firmados entre Moscú y Pionyang en 1961, 2000 y 2001.
Antes de ese encuentro, Putin y Kim Jong-un celebraron una cumbre en formato ampliado de unos 90 minutos en la residencia de huéspedes de Kumsusan en Pionyang, donde Putin se encuentra de visita por primera vez en 24 años.
Apoyo
Fue en ese escenario en el que el presidente ruso agradeció al líder norcoreano, Kim Jong-un, su “apoyo inquebrantable” a la invasión de Ucrania.
“Rusia aprecia el apoyo constante e inquebrantable de la República Popular Democrática de Corea (nombre oficial de Corea del Norte) a las políticas rusas, incluyendo lo que se refiere a Ucrania”, dijo Putin.
Asimismo, dijo que Moscú “está peleando contra décadas de políticas imperialistas impuestas por Estados Unidos”, y subrayó que la relación entre Rusia y Corea del Norte “se basa en la igualdad y el respeto mutuos”, según la intervención recogida por TASS.
Además, Putin invitó a Kim a viajar a Moscú para la próxima cumbre entre ambos países, y expresó su “admiración” por la “transformación” experimentada por la capital norcoreana durante los últimos 24 años.
Kim valora la misión de una Federación Rusa “fuerte”
“El gobierno de la República Popular Democrática de Corea (nombre oficial de Corea del Norte) valora la importante misión y el papel de una Federación Rusa fuerte en lo que respecta al mantenimiento de la estabilidad y el equilibrio estratégicos en el mundo”, dijo por su parte Kim.
El líder norcoreano también expresó el “pleno apoyo y solidaridad para con el Gobierno, el ejército y el pueblo rusos en lo respectivo a la ejecución de la operación militar especial en Ucrania para proteger su soberanía, sus intereses en materia de seguridad y su integridad territorial”.
Kim añadió que la situación global está cambiando rápidamente y que en ese contexto Pionyang pretende fortalecer sus lazos estratégicos con Moscú.
Tras los comentarios de apertura, el resto de la cumbre, que duró en total en torno a 90 minutos, se celebró a puerta cerrada.